No son pocos los jugadores que se atrevieron a darle una oportunidad a Agents of Mayhem, y de verdad cuando le dedicas el tiempo suficiente, se puede ver que es un juego que es divertido y que sigue (o intenta seguir) el camino marcado por juegos como Overwatch en el sentido del humor o el estilo gráfico y de personajes.

Sin embargo, el verdadero problema que tiene es de diseño, en el sentido de haber intentado implementar algo que no funciona, como es el hecho de necesitar utilizar a tres personajes a la vez. Y es que podemos pasarnos el juego con solo uno de los tres personajes que llevamos, y tan solo cambiar de personaje cuando estamos a punto de morir con el primero, o por el simple hecho de cambiar por monotonía. A pesar de que cada personaje es distinto, la mayoría de los jugadores acabarán seleccionando a los mejores según su estilo de juego (recordemos, hay que seleccionar a tres obligatoriamente y jugar a la vez con tres), y olvidarnos del resto, algo que afecta a la jugabilidad cuando siempre jugamos de la misma forma.

Sus creadores intentaron darnos más opciones de juego ofreciéndonos a un puñado de distintos tipos de personajes, cada uno de ellos con sus propias características y cualidades, con el grave problema de que todas las misiones se hacían de la misma forma y casi no hacía falta cambiar entre ellos. El resultado es tener a una enorme plantilla para nada, y hacer el juego monótno y aburrido por no haber sabido vender el hecho de que jugar con tres personajes a la vez puede ser divertido.

Y ya no hablamos de si contase con un cooperativo para tres jugadores, podría ser muchísimo más divertido de lo que en realidad es...

Agents of Mayhem se podría definir de muchas formas, pero es lo más parecido a Crackdown que podemos echarnos a la cara. Hablamos de personajes que se van haciendo más fuerte realizando misiones en un mundo abierto donde tendremos opciones de shooter en tercera persona, hack\'n slash y beat\'em up, así como una estética muy colorista.

Ya lo hemos probado varias veces en distintas ferias y eventos, y en distintas versiones (PS4 y PC) y lo que siempre vemos es que intenta ser un Crackdown sin conseguirlo, por dos motivos principales. Por un lado, a los personajes les falta mucho carisma y personalidad (algo que también le pasa a los dos primeros Crackdown, dicho sea de paso). Sin embargo, la opción de juego cooperativo para dos o cuatro jugadores se le echa en falta a leguas, algo que también hemos comentado en varias ocasiones (y esto es algo que lo que Crackdown sí que le gana por la gorra).

Obviamente, un juego de estas características no está demasiado extendido, al contar con una mezcla de muchos personajes (Battleborn...), una estética colorista (Battleborn...), personajes tipo superhéroes (Crackdown) y sentido del humor (Saints Row Gat Out of Hell). La fecha de lanzamiento a mediados de agosto ayudará a que no se la pegue demasiado, y además no todo el mundo tiene una Xbox One (o un PC).

Ya lo hemos comentado anteriormente, pero a nosotros este Agent of Mayhem nos recuerda mucho a lo que en 2016 hizo un juego como Battleborn. No hablamos de su estilo gráfico o de sus opciones de juego, sino de lo que podría sucederle cuando sea lanzado al mercado, y esperemos sinceramente equivocarnos.

Lo hemos probado, y hemos visto que a pesar de ser un juego rápido y divertido, no tiene ninguna pretensión en ningún sentido, es decir, no destacaba en ninguna de sus características. Se jugaba de forma similar a como lo harían juegos como Crackdown, aunque no se puede jugar en modo cooperativo (es decir, como el primero) y no se desarrolla en un mundo abierto sino por misiones concretas en escenarios cerrados. Cuenta, eso sí, con el gran sentido del humor de Saint\'s Row que en España veremos muy apagado por culpa de estar traducido pero no doblado, por lo que nos perderemos gran parte de los diálogos aquellos que no dominemos el inglés (mirar textos mientras luchas contra decenas de enemigos no es la mejor para sobrevivir). Otro elemento similar es que además basa una de sus grandes características en la cantidad de personajes diferentes a nuestra disposición que irán evolucionando cada uno por su cuenta según vayamos jugando. La combinación no es mala, pero se le echa en falta muchas cosas.

Por todo ello, nos encontramos con un título que difícilmente llegue a vender bien dentro de nuestras fronteras, y por eso decimos que nos recuerda a Battleborn en el sentido de no ser un mal juego al que le faltan muchos elementos para ser uno de los grandes. Eso sí, podría ayudarle el hecho de estar ambientado en Saint\'s Row y que se venda de esta forma puede hacer que gran cantidad de público acabe comprándoselo, decepcionándose cuando le eche el guante encima. ES un juego para probar primero antes de comprar.