Pero en todo este elenco pocos han conseguido satisfacer realmente a los fans, y los que no cojeaban de un pie lo hacían de otro; un enfoque demasiado arcade era malo para los fieles de la serie, que querían magias espectaculares y una buena puesta en escena. Por otra parte, los juegos excesivamente espectaculares no conseguían llegar a los jugadores normales, que no se hacían con los extraños sistemas de control y juego.
Con el objetivo de encontrar un punto medio entre ambos enfoques llega Super Dragon Ball, nacido en los arcades pero respetuoso con el componente fantástico del juego: los poderosísimos ataques energéticos, la capacidad para volar o la destrucción de los entornos...
Sin meternos en comparaciones absurdas, vamos a ver los principales aciertos y fallos de este juego, así como un punto muy interesante para muchos jugadores y que no se recoge en ningún análisis: su fidelidad a la serie original.
Sistema de juego
Super Dragon Ball viene a ser una mezcla entre el estilo de Virtua Fighter (combos, 2 botones de ataque y una guardia) y el de Street Fighter, incluyendo magias energéticas que se introducen con combinaciones de botones.
El problema del juego es que acaba cojeando por ambas partes; en cuanto a combos anda algo corto, presentando 3 ó 4 principales por jugador (con variaciones, obviamente) y 3 ó 4 ataques especiales. Aunque a priori sabe a poco, el juego funciona bastante bien y los combates son rápidos y fluidos.
Un punto decisivo para el interés de los combates es la variedad en los golpes y ataques especiales de los distintos personajes, que dejan de ser "clónicos" para presentar numerosas diferencias en cuanto a repertorio de ataques físicos, energéticos, etc.
Al control básico hay que sumar la posibilidad de volar (simplemente pulsando un botón, muy cómodo y bien implementado) y de realizar esquives, "desapariciones" y acometidas. Bastante intuitivo y bien implementado.
Otro de los puntos fuertes del título es la posibilidad de personalizar a los distintos personajes del juego mediante cartas, que les llevan a aprender nuevos ataques y habilidades especiales ; así, su poder y estadísticas irán subiendo y además de poder realizar los impresionantes "dragon finish" (con poca vida y capaces de destruir hasta el planeta en el que luchemos) tendremos la posibilidad de utilizar - por ejemplo - una habichuela (y ver como el personaje se la come) para recuperar energía.
Más detalles...
El juego contará con 18 personajes; 13 iniciales - Goku, Vegeta, Gohan, Trunks, Piccolo, Krilin, Chi-Chi, A-16, A-17, A-18, Freezer, Célula y Buu, y 5 ocultos Metal Freezer (rediseñado para la ocasión por Toriyama), Videl, Piccolo "Senior", Gohan Joven y Vegeta Maligno.
La parte buena es que en general son bastante distintos y no se incluyen distintos estados de superguerrero o transformaciones entre los personajes principales. La mala es que los ocultos en general si son "mejoras" de los personajes, al tiempo que ciertos personajes (A-17 y A-18) son clónicos.
Como un añadido muy interesante vamos a tener que las transformaciones de poder (como los superguerreros) son sólo temporales y no podremos mantenerlas indefinidamente, lo que da un toque muy estratégico a los combates. Además de esto vamos a tener barras de energía que nos impedirán lanzar los ataques a distancia indefinidamente , recompensando el juego con más energía especial a los jugadores que ataquen y dominen el sistema de juego. Contras, ataques sorpresa, combos aéreos... todo puntúa para premiar al mejor jugador.
Destacar que además del modo historia/arcade (bastante pobre como tal) el juego tiene un interesante "survival" para ir consiguiendo cartas que mejoren a los personajes y/o las bolas de Dragón, que nos permitirán desbloquear a los personajes y aprender nuevos ataques. Ideal para dedicarle horas a 1 sólo jugador (aunque avisamos, luego la peña no querrá jugar contra vuestros personajes %u201Cdopados%u201D)...
Fidelidad a la serie original
Otra vez nos encontramos con una de cal y una de arena... Si bien hay detalles en el juego que harán las delicias de los aficionados (como los escenarios o los ataques finales) también hay patinazos incomprensibles.
Sobre los escenarios, destacar el cuidado con el que se han recreado las localizaciones más importantes del juego, incluyendo incluso a personajes emblemáticos de la serie, como Puar o Mr. Satán, a las fuerzas de defensa de la tierra... Podemos luchar en mitad de la ciudad donde llegaron los guerreros del espacio, con una nave en mitad del escenario y la ciudad medio destruida, o destruir las paredes del torneo de artes marciales, por ejemplo.
Los personajes están muy bien recreados, y Chi-Chi merece atención especial. Además de ser su primera aparición en un torneo utiliza el abanico mágico, la nube kinton o el bastón de su marido para paliar su falta de especiales. Además de esto, todos los personajes tienen un estupendo Dragon Finish, un espectacular ataque especial para terminar los combates y dejar al rival con la boca abierta. Y en cuanto a los ítems se ha trabajado duro y se han utilizado objetos muy emblemáticos en la serie: el scanner, las habichuelas, las chaquetas protectoras...
Vamos con los tirones de oreja; en el plantel de personajes encontramos ausencias muy importantes. Chi-Chi queda genial, pero hace que nos preguntemos que pasa con Ten-shi-han, Yamsha o Chaoz, mucho más emblemáticos (olvidándonos de personajes más recientes, como las fusiones, ya que el juego se centra en la saga de célula). Por si fuera poco los 2 malos más importantes (Freezer y Célula) no tienen sus transformaciones, y con Célula se mete la pata, ya que en su forma perfecta sigue siendo capaz de absorber energía ¿?. Otro detalle incomprensible es la falta de ring-out en el escenario del torneo, más teniendo en cuenta lo bien que funciona el sistema de vuelo. Pues nada, por fin podremos patearnos todo el escenario y luchar hasta en las gradas...
Técnicamente...
Bastante mejorable, el acabado de Super Dragon Ball es un juego de luces y sombras. Por una parte los personajes, que están bien realizados pero que no llegan a lo visto en otras entregas, presentando un aspecto algo simple y unas animaciones un tanto mecánicas (aunque con alguna que otra sorpresa agradable). Los escenarios, por contra, están bastante bien realizados, llenos de detalles y son mucho más fieles al manga original que las aproximaciones excesivamente vacías y poligonales vistas hasta ahora. Por si fuera poco, todos presentan multitud de zonas y objetos destructibles...
Pero sin duda el punto en el que más flaquea el juego es en el uso de ataques especiales y efectos de iluminación. Las ondas de energía son excesivamente poligonales (y algunas horrorosamente feas e inventadas, como las de Vegeta), pero los efectos de luz son espantosos; los superguerreros quedan fatal y molestan a la vista con los brillos que emiten ...
En cuanto al sonido, en general las melodías son bastante buenas (con alguna que otra pieza magistral), pero todas son inventadas para la ocasión; no se aprovecha casi nada de la banda sonora original del juego. ¿Y las voces? Pues al no haber un modo historia como tal ni conversaciones entre los personajes quedan en un segundísimo plano, sólo al lanzar algunos ataques. Eso sí, en la versión final podremos dejar las japonesas o elegir las americanas, lo que siempre es de agradecer...
Conclusión
A falta de dedicarle más tiempo al sistema de cartas, desbloquear todos los personajes y exprimir los secretos que esconde el juego, nos quedamos con buen sabor de boca pero %u201Ca medias%u201D en determinados apartados.
Con más personajes y ataques, un auténtico modo historia y algo más de cuidado hacia los pequeños detalles estaríamos hablando de la mejor adaptación a las 3D... (y de un título infinitamente más jugable que "Tenkaichi").