Desde su primera entrega, la saga Mafia se ha caracterizado por su capacidad de sumergir al jugador en épocas icónicas del crimen organizado. Ahora, Hangar 13, en colaboración con Stormind Games, nos lleva a una de las épocas más fascinantes en la historia de la mafia: Sicilia a principios del siglo XX. Este nuevo enfoque promete una experiencia diferente, alejándose de los entornos urbanos tradicionales para adentrarnos en una cultura marcada por códigos de honor y profundas raíces históricas.
Una Sicilia viva: El desafío de recrear una época olvidada
Diario de desarrollo #1
El equipo de desarrollo tomó la decisión de trasladar la acción fuera de las ciudades para explorar la identidad real de la mafia en sus orígenes. Para lograrlo, se embarcaron en un viaje a Sicilia, recorriendo museos, pueblos históricos y entrevistando expertos. Estas investigaciones han permitido capturar cada detalle de una época donde la pobreza y la tradición definían la vida cotidiana.
Uno de los aspectos clave fue la recreación de los escenarios. Sicilia, lejos de ser un paisaje homogéneo, está influenciada por múltiples culturas, desde las ruinas griegas y romanas hasta la arquitectura bizantina, normanda y barroca. Este crisol de influencias ha sido cuidadosamente integrado para hacer que cada localización en el juego refleje la diversidad y profundidad de la historia siciliana.
La atención al detalle ha sido primordial. Los desarrolladores han trabajado con expertos en historia de la mafia para garantizar que los elementos del juego sean verídicos y reflejen la realidad de la época. Desde las vestimentas hasta las armas artesanales, cada objeto fue diseñado con precisión.
Uno de los descubrimientos más fascinantes durante la investigación fue una pequeña herrería familiar donde las técnicas de fabricación de cuchillos han permanecido inalteradas por generaciones. Este nivel de compromiso ha permitido crear armas con detalles únicos que reflejan fielmente los estilos regionales sicilianos.
A diferencia de los juegos anteriores de la saga, donde las ciudades eran el protagonista, en Mafia: The Old Country el entorno natural juega un papel fundamental. Los paisajes de la isla no son meros decorados, sino elementos vivos que reaccionan a la historia y al jugador. Se han utilizado tecnologías avanzadas para ofrecer una ambientación de alta fidelidad, asegurando que cada rincón de la isla se sienta genuino.
Además, el equipo ha buscado representar una Sicilia más íntima, donde las relaciones entre personajes están influenciadas por la vida rural y los valores arraigados en la comunidad. Esta inmersión en la cultura siciliana ayuda a construir una narrativa que va más allá de los típicos conflictos criminales, explorando las raíces de la mafia y el código de honor que definió a sus integrantes.
El desarrollo de Mafia: The Old Country ha sido un proceso meticuloso, donde la pasión por la autenticidad y la historia han guiado cada decisión. La exploración de una Sicilia jamás vista en videojuegos, junto con la dedicación a la fidelidad histórica, prometen una experiencia envolvente para los jugadores. Más que un escenario, la isla se convierte en un personaje vivo, influenciado por sus propias tradiciones y conflictos. Estamos ante un título que redefine la visión de la mafia en los videojuegos.