Tras la salida del reciente Mario Kart Worlds, SEGA tiene que hacer un enorme esfuerzo en traer algo diferente a los juegos de "tipo karts" (aunque cada vez la línea entre el tipo de vehículo queda más difusa). Por ello, en Sonic Racing: Crossworlds han intentado hacer algo muy diferente a lo que los juegos de Nintendo nos ofrecen, y esto viene de la mano de la personalización de sus vehículos. Esta no se limita a la estética: cada vehículo puede configurarse para optimizar
rendimiento, manejo y habilidades especiales. Disponemos de más de
40 modelos base, cada uno con parámetros únicos de
velocidad, aceleración, tracción y peso. Estos atributos se ven modificados por las
piezas mecánicas que instalamos, divididas en categorías como motor, suspensión, neumáticos y chasis. Por ejemplo, un motor de tipo "Turbo Vortex" mejora la aceleración en terrenos acuáticos, mientras que una suspensión "Graviton" reduce el impacto en zonas aéreas. Los jugadores debemos analizar cada pista y su entorno para elegir la configuración más adecuada. Además, cada vehículo puede equiparse con
gadgets, que funcionan como habilidades pasivas o activas. Algunos gadgets permiten
absorber ítems cercanos, otros generan
escudos temporales o
modifican el comportamiento de los anillos de travesía. La gestión de estos gadgets es clave, ya que ocupan espacios limitados y su activación depende de condiciones específicas durante la carrera.
La dimensión estética en Sonic Racing: Crossworlds es tan profunda como la técnica. Cada vehículo puede modificarse con
más de 100 piezas visuales, incluyendo
alerones, parachoques, retrovisores, faros y escapes. Estas piezas no afectan el rendimiento, pero permiten crear diseños únicos. Además, contamos con una colección de
pegatinas, texturas y patrones que pueden aplicarse en múltiples capas, tanto en el exterior como en el
interior del vehículo. Los jugadores debemos desbloquear estos elementos mediante progresión, desafíos o eventos especiales. También existe un sistema de
paletas de color dinámicas, que permite cambiar el tono del vehículo según el mundo CrossWorld en el que estemos compitiendo. Esta opción puede activarse o desactivarse en el menú de configuración. La personalización visual se extiende a los
efectos de partículas del vehículo, como estelas de velocidad, humo de derrape o luces de impulso, que pueden ajustarse para reflejar el estilo del jugador. Incluso se ha confirmado la inclusión de
temas musicales personalizados que suenan al activar el modo frenesí, seleccionables desde el garaje.
Una de las novedades más destacadas de Sonic Racing: Crossworlds es la
desvinculación entre personajes y vehículos. Esto significa que cualquier personaje puede pilotar cualquier vehículo, lo que multiplica las posibilidades de configuración. Cada personaje aporta
una habilidad pasiva, como mayor recuperación tras colisión o bonificación en ítems defensivos. Al combinarlo con un vehículo específico y gadgets adecuados, se crean
sinergias únicas. Por ejemplo, Shadow en un vehículo ligero con gadgets de invisibilidad puede dominar pistas aéreas, mientras que Eggman en un vehículo pesado con gadgets de absorción puede controlar el ritmo en pistas terrestres. Los jugadores debemos experimentar con estas combinaciones para encontrar la que mejor se adapte a nuestro estilo. Además, existe un sistema de
afinidad CrossWorld, que otorga bonificaciones si el conjunto personaje-vehículo-gadget está alineado con el mundo dimensional en el que competimos. Esta afinidad se refleja en mejoras de velocidad, recuperación o duración de ítems. El juego incluye un
simulador de configuración en el garaje, donde podemos probar combinaciones antes de entrar en carrera.
Resumen general y disponibilidad
Sonic Racing: Crossworlds estará disponible el
25 de septiembre de 2025 en todas las plataformas principales, incluyendo
Switch 2, donde se lanzará en formato digital durante las fiestas y en físico a principios de 2026. La edición física incluirá el juego completo en cartucho, sin necesidad de descargas adicionales. Los jugadores que ya tengan el juego en Switch podrán adquirir un
paquete de actualización por 10 €, manteniendo contenido y progreso. El juego contará con
multijugador local y online para hasta 12 jugadores,
crossplay entre plataformas y modos como
Race Park,
Time Trials y
Grand Prix con rivalidad. La edición digital deluxe incluye personajes de Sonic Prime y acceso anticipado. La personalización, tanto técnica como visual, se convierte en un eje central de la experiencia, permitiendo a cada jugador crear su máquina ideal y adaptarla a cada carrera.
Comparativa con Mario Kart World
El recientemente lanzado
Mario Kart World en Switch 2 ha elevado el estándar técnico de los juegos de carreras arcade, con
gráficos en 4K,
120 fps y carreras de hasta
24 jugadores. Sin embargo, Sonic Racing: Crossworlds apuesta por una
profundidad mecánica y estratégica superior, con un sistema de personalización más complejo y una jugabilidad que combina
dimensiones dinámicas, gadgets al estilo RPG y afinidades entre personajes y mundos. Mientras Mario Kart World introduce modos como
Supervivencia y exploración libre entre circuitos, Sonic Racing: Crossworlds se enfoca en la
transformación de pistas y la
elección táctica del mundo CrossWorld en cada carrera. Ambos títulos representan enfoques distintos: uno centrado en la espectacularidad visual y el multijugador masivo, y otro en la
personalización profunda y la estrategia dimensional. Los jugadores debemos valorar qué tipo de experiencia buscamos, aunque no cabe duda de que Sonic Racing: Crossworlds ofrece una propuesta única dentro del género.