DIFICULTAD de Stranger of Paradise: Final Fantasy Origin

Es fácil comparar este Stranger of Paradise: Final Fantasy Origin con cualquier otro juego de tipo soulsborne, aunque difiere bastante en sus mecánicas de juego y planteamiento general. Por eso, el juego no llega a tener la dificultad de ninguno de estos juegos, ni tampoco de los NioH o Sekiro, de los que toma prestadas algunas mecánicas de juego. Aún así, algunos combates pueden ser un poco complicados si no dominamos bien algunas técnicas, especialmente el uso de la Corazánima, que nos permite adquirir poderes enemigos, recargar nuestra energía y magia, y parar los ataques enemigos.

Aparte de esto, Stranger of Paradise: Final Fantasy Origin cuenta con tres modos de dificultad que se configuran nada más comenzar una partida, y que además pueden cambiarse en cualquier momento entrando en el menú del juego (botón SELECT). Como en muchos juegos de corte similar, la diferencia reside en el daño que nos hacen los enemigos, y el daño que hacemos nosotros, y en un segundo lugar, a menor nivel de dificultad, mayor es la colaboración de los personajes IA (dos) que vienen en el grupo y que no pueden ser eliminados.

Como consejo, si estás acostumbrado a los juegos de tipo souls, te recomendamos que elijas el nivel más alto de dificultad, porque el juego no te va a resultar un reto si no lo haces así (y aún así, tampoco mucho). Si vienes de la saga Final Fantasy, te recomendamos el nivel más bajo de dificultad para que no tengas demasiados problemas en avanzar, y si lo ves sencillo, cambiarlo al intermedio.